Miel cruda Moncabrer, el tesoro de la naturaleza

Llamamos Miel cruda a esta miel, porque ha sido extraída, procesada y envasada sin que se haya calentado en ninguno de estos procesos, a diferencia de la mayoría de las mieles que habitualmente están sometidas a un proceso de calor con el que se pierden muchas de sus características, tanto aromáticas como de sabor. Es decir, se elaboraba como lo hacían nuestros abuelos.

Por este motivo, conserva integra sus vitaminas, sus minerales y enzimas. Al igual que son más preferibles las verduras crudas debido a su contenido nutricional, lo mismo se puede aplicar a la miel.

Los expertos del sector de la miel afirman que sabe mejor que la miel transformada. Los sabores de los néctares florales utilizados para producir la miel tienden a ser más pronunciado en miel cruda. En general, las mieles de color más oscuro son más sabrosas de mieles de color más claro.

Por esta razón y en función de la época del año, se puede encontrar, casi siempre, en estado cremoso o granulado, síntoma de que es una miel que no ha sido calentada ni pasteurizada. Cabe destacar que existen mieles que por su tipo de cristalización no son muy adecuadas para envasarlas en crudo, como por ejemplo la de girasol ya que su cristalización es extremadamente dura.

Actualmente, los laboratorios y fábricas producen a diario alimentos repletos de aditivos que dañan irreparablemente la salud, mientras que la miel cruda Moncabrer es un tesoro de la naturaleza.